Si bien la sensación es que el aumento de las tarifas de remises y del pasaje de los colectivos es inevitable, porque toda medida adoptada en la capital litoraleña es imitada casi de inmediato por las autoridades de otras localidades, los empresarios del sector no quieren seguir esperando y confían en que el Ejecutivo local apele a sus facultades para decretar los aumentos correspondientes.
Los transportistas asumen que la cifra es negociable
En el caso de los remises, la actual tarifa rige desde hace dos años, mientras que los representantes del sector señalan que durante el año pasado solamente el combustible -tanto el gas como los líquidos- han aumentado un 38%.