Así lo anunciaron los ministro de Economía, Amado Boudou, y de Industria, Débora Giorgi, junto al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno y al vicepresidente de la marca, Eduardo Puricelli.
La firma se comprometió a aumentar la capacidad de producción de su utilitario Sprinter a través de la apertura de un segundo turno de trabajo a partir de agosto, que se mantendrá este año y durante 2012, lo cual demandará la incorporación de 200 empleados.
A partir de este incremento en su producción, Mercedes Benz proyecta que sus exportaciones del utilitario a Brasil y a terceros mercados crecerá un 50 en 2012 respecto a las cifras de 2010.
Por otra parte, la firma comenzará en este año a exportar chasis y buses carrozados y en 2012 exportará un nuevo camión de producción nacional a mercados latinoamericanos.
La vuelta a la producción de camiones en el país, había sido anunciada el año pasado con una inversión de 53 millones de pesos y generando sustitución de importaciones por 300 millones de pesos al año.
El plan rubricado implica un aumento de las exportaciones para alcanzar un superávit comercial de 57 millones de dólares en 2012 y así revertir el déficit de la balanza que la compañía tuvo en 2010 y que llegó los 376 millones de dólares.
El convenio también obliga a la empresa a ajustar volúmenes de importación en todas sus unidades de negocios a partir de este año y una mayor integración a partir de 2012. Así, la empresa comenzará realizar ensamblado de motor en el país y comenzarán a fabricar ejes delanteros y cardanes, que actualmente importan de Brasil, por lo que incorporará otros 200 trabajadores.
Mercedes Benz es la tercera empresa que cierra su programa de importaciones y se suma así a los planes presentados –y ya aprobados- por Volkswagen y Porsche.