Un operativo de la Policía de la Ciudad se realiza desde pasadas las 7 en vías de la estación Las Heras de la línea H de subterráneos, con el propósito de desalojar a los trabajadores que cumplen con un paro hasta las 12, al igual que en la línea E y el Premetro, en rechazo al acuerdo paritario firmado por la Unión de Transporte Automotor (UTA).
El comisario a cargo del operativo explicó que tenía “orden de hacer funcionar el servicio”, en tanto los trabajadores nucleados en la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (Agtsyp) mantuvieron la postura de negarse a bajar de los coches, tras los cual la Policía se retiró.
“El convenio colectivo de trabajo dice que sólo los conductores pueden manejar el coche”, explicó Néstor Segovia, delegado de los ‘metrodelegados’, en declaraciones a la prensa en el acceso a la estación Las Heras, que fue cerrada por la policía. Según explicó, al momento del operativo “no había ningún supervisor ni personal jerárquico para manejar los coches”.
“Somos 200 trabajadores que no vamos a entregar nuestro puesto de laburo y queremos discutir paritarias”, insistió Segovia tras responsabilizar al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por “hacer un circo”. Los metrodelegados denunciaron que el operativo se cumplió “sin una orden judicial” y que el comisario a cargo les explicó que “el Ministerio de Transporte ordenó sacar a los trabajadores”. “Si vienen con orden judicial, ¿quién va a manejar si nos vamos todos?”, preguntó en forma retórica Segovia.
En tanto, la empresa Metrovías advirtió en un comunicado de prensa que, de continuar las medidas de fuerza, aplicará “sanciones más severas” de las que realizó hasta el momento con 114 telegramas de suspensión enviados.
También aclaró que inició acciones ante la justicia laboral para lograr el desafuero de “95 delegados gremiales que cuentan con tutela sindical” para la “efectivización de las sanciones“.
La empresa recordó asimismo que el acuerdo salarial por paritarias firmado el 12 de abril pasado “está siendo abonado según lo acordado y que fue rubricado por las partes intervinientes y ajustado completamente a derecho“.
Por su parte, los metrodelegados insisten en que fueron excluidos de las negociaciones y que lo acordado con la UTA “es inadmisible”.
“Se sentaron en una mesa y acordaron 15 por ciento en tres cuotas y nosotros pedimos que se nos convoque y hagan una oferta razonable“, sostuvo el delegado Brian Aguirre.
Desde el 14 de abril (van 38 días de conflicto), los metrodelegados iniciaron un plan de acción en todas las líneas de subterráneos, que incluyó apertura de molinetes y paros programados de dos horas, que esta semana se profundizó hasta alcanzar las cuatro horas.
La medida de fuerza de hoy comenzó a las 0 con la paralización de las tareas de limpieza, taller y mantenimiento, continúa con la interrupción del servicio desde las 5.30 hasta las 12 en las líneas E y H y el Premetro, y el libre paso posterior por los molinetes hasta las 14.
El secretario de Prensa del sindicato, Enrique Rositto, convocó para las 11 de mañana a una rueda de prensa en la estación Plaza de los Virreyes de la línea E, en la cual el gremio analizará “la evolución del conflicto y explicará los pasos a seguir”.