Un vibrador, entre otros objetos, fue confundido con una bomba en el aeropuerto Schönefeld de Berlín, Alemania, lo que provocó el cierre parcial de una terminal el pasado martes.
Cuando los empleados del aeropuerto realizaban los controles rutinarios de rayos X del equipaje detectaron “contenido sospechoso”, según la policía federal en Berlín.
Debido a que el escaneo inicial no dejó completamente claro lo que la maleta contenía, se emitió una alerta poco antes de las 11 de la mañana, hora local, que causó el cierre de la terminal D del aeropuerto mientras la policía investigaba los objetos sospechosos.
El dueño del equipaje fue llamado a través de los altavoces y finalmente habló con las autoridades sobre lo que llevaba.
Sin embargo, mostró reticencia a explicar correctamente el contenido de su maleta, posiblemente por vergüenza, de acuerdo a un portavoz de la policía. De hecho, dijo que lo que allí tenía eran “cosas técnicas”.
Tras una investigación que se extendió por una hora e incluyó un escuadrón para explosivos, las autoridades determinaron por fin que los objetos eran juguetes sexuales. La terminal D del aeropuerto fue reabierta al medio día.
Otro incidente en aeropuerto alemán
El incidente ocurrió el mismo día en que la terminal aérea de Frankfurt –el más concurrido de Alemania– fue evacuada después de que a una familia que dio positivo por explosivos se le permitiera salir del área de seguridad por error.
Se trataba de una crema y la familia fue interrogada luego, pero el error en Frankfurt afectó a más de siete mil pasajeros.
Los dos incidentes se produjeron durante unos de los meses más concurridos para viajar en Europa, pues muchas personas están de vacaciones.
En 2016, el último año con datos disponibles, casi una cuarta parte de los 1.200 millones de viajes de placer que realizaron los europeos fueron en julio y agosto.