Luego de cuatro meses en que 19 tripulantes fueron impedidos de dejar el país por la incautación de la aeronave en que viajaban, la justicia argentina autorizó la salida del país de los últimos cinco tripulantes del avión de la compañía Emtrasur.
Cabe resaltar que, el 6 de junio de este año, el avión de la filial estatal Coviansa, que llevaba una carga de autopartes, ingresó a Argentina proveniente de México y a pedido del Departamento de Justicia de los Estados Unidos al Ministerio de Justicia argentino, se solicitó la incautación del Boeing 747 de la compañía venezolana Emtrasur, basado en que la aerolínea iraní Mahan Air (exdueña del avión), no estaba habilitada por el gobierno de Estados Unidos para vender el avión a la empresa Conviasa por su política de sanciones contra Irán.
Esta incautación afectó a 19 trabajadores, compuestos por 14 venezolanos y cinco iraníes, quienes además de ser impedidos de abandonar el país, fueron investigados por posibles vínculos con grupos terroristas.
De acuerdo con las investigaciones de cada uno de los tripulantes, ninguno fue relacionado con actividades ilícitas por lo que se les autorizó su salida del país.
Así, desde la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF), a través de la sección de aviación civil, junto a ITF Américas, se emprendieron acciones desde que el avión fue detenido en Buenos Aires para que se respetaran los derechos de los tripulantes y que fueran liberados lo más pronto posible.
“Ha sido una larga lucha judicial y mediática en contra de los trabajadores y trabajadoras asignadas a la aeronave. Gracias a la intervención de la ITF y de varias organizaciones sindicales se dio un fallo favorable que determinó que no existen pruebas para vincularlos con grupos terroristas y de esa forma mantenerlos retenidos en el país”, comentó Gabriel Mocho Rodríguez, secretario de la sección de aviación civil de la ITF.
Al respecto, Edgar Díaz, secretario regional de la ITF declaró: “La ITF y el movimiento sindical internacional celebramos la liberación de la tripulación de la aeronave de Emtrasur. Fueron cuatro meses de incertidumbre en que se vieron involucradas las familias. Desde la ITF continuaremos luchando para que se respeten los derechos laborales de los trabajadores y trabajadoras”.
