El gobierno de Tierra del Fuego adjudicó la construcción de la obra de la ruta costera de 132 kilómetros de extensión que unirá Ushuaia con el sector este de la Isla.
Este corredor permitirá desarrollar proyectos productivos en las áreas de pesca, turismo y alimentos, y demandará una inversión de 1.700 millones de pesos, informaron fuentes oficiales. Los trabajos que se financiarán con recursos propios de la provincia, producto de la colocación de títulos de deuda en el exterior, fueron adjudicados a la empresa Luis Felipe Gancedo, que tuvo que presentar un estudio de impacto ambiental y arqueológico debido a que la ruta atravesará zona boscosa y de alto valor histórico.
El vicegobernador provincial, Juan Carlos Arcando, sostuvo que la obra será “un corredor turístico y productivo a la vez, que dará más opciones a los visitantes pero también más trabajo a los pequeños emprendedores”. También remarcó que el proyecto será sometido a una audiencia pública, y transmitió “tranquilidad a los vecinos” porque “se tendrá en cuenta particularmente la preservación del medio ambiente y la protección de los sitios arqueológicos”. Según el funcionario, se trata de “la obra más importante y más emblemática” encarada por la gestión de la gobernadora Rosana Bertone.
El proyecto contempla un corredor que pasará por Puerto Almanza, un paraje pensado como nuevo núcleo poblacional, Estancia Moat y Cabo San Pío, con la idea de desarrollar polos de actividades productivas ligadas a la “agricultura (frutihortícola), acuicultura, pesca y piscicultura, además de la elaboración de productos de valor agregado de manufactura artesanal sobre la materia prima local, como dulces, ahumados y conservas”. Incluso, el Gobierno Nacional lanzó el año pasado, a través del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, la creación de un consorcio público-privado para la instalación de una granja multitrófica destinada al cultivo marino en el Canal Beagle.
El corredor también incluye la identificación de “sectores estratégicos de recursos naturales renovables (marítimo-pesqueros); energéticos (Eólico) y recursos no renovables como la turba”. La obra se dividirá en dos etapas: el mejoramiento de los tramos de camino ya existentes y la apertura de nuevos trayectos, que se realizarán en forma simultánea y con un plazo de ejecución de 24 meses a partir de firmada el acta de inicio de obra, señalaron las autoridades.
Según los fundamentos del proyecto, este emprendimiento solucionará la falta de conectividad y accesibilidad que presenta el sector suroriental de la isla, atravesando cinco áreas de máximo interés: Olivia-Estancia El Túnel; Estancia Río Encajonado-Estancia Remolino; Punta Paraná-Almanza-Estancia Harberton y Moat-Bahía Aguirre.
