Así lo decidieron los legisladores porteños en homenaje a la inmigrante que luchó en la década del 20′ contra la trata de mujeres en Argentina.
La estación de subte de la línea D “Callao” pasará a llamarse también “Raquel Liberman”, de acuerdo a una ley sancionada en la Legislatura porteña en homenaje a la joven polaca que llegó a la Argentina como inmigrante se convirtió en un símbolo de lucha contra la trata ya que fue quien denunció, en 1929, a una red que explotaba a mujeres.
Los legisladores, en rigor, dieron una primera sanción al cambio de nombre impulsado por Patricia Vischi, del bloque Evolución, en recuerdo de Liberman, la mujer que sirvió de inspiración al personaje de una novela televisiva que retrata la explotación sexual a la que fueron sometidas inmigrantes que arribaban al país durante las primera décadas del siglo XX.