UNICEF reveló que las lesiones y muertes por siniestros de tráfico son la primera causa de muerte en niños y jóvenes en todo el mundo. En ese sentido, Ituran Argentina difundió un comunicado a propósito del Día de las Infancias con recomendaciones para su seguridad vial.
Según las cifras de UNICEF, cada dos minutos un niño o adolescente de entre 0 y 19 años fallece por este motivo, lo que supone más de 200 mil muertes al año y 600 al día. De acuerdo a Daniela Medina, Gerente del Centro de Comando y Control de Ituran Argentina, es importante saber que los asientos de los autos no están diseñados para niños. Al ser diferentes las proporciones de los cuerpos, es necesaria la presencia de un asiento especial para que todos los chicos se transporten seguros en cada viaje, por más corto que sea.
El Sistema de Retención Infantil (SRI) son todas las sillitas y otros dispositivos de sujeción homologados que permiten transportar a niños y niñas en el asiento trasero del vehículo de forma segura. La Ley Nº 5294 establece la obligatoriedad de la utilización de los SRI y la prohibición de viajar en los asientos delanteros a todos los niños desde su nacimiento hasta los 12 años, con estatura inferior a 1,50 metros o que pesen menos de 36 kg.
Según la Sociedad Argentina de Pediatría existen 5 categorías de SRI que deben utilizarse acorde a la altura, peso y edad de los niños:
- Grupo 0: de 0 a 6 meses y hasta 10kg (son conocido como “capazos” o “huevitos” y se ajustan con cinturón de seguridad laterales en el asiento trasero).
- Grupo 0+: de 0 a 15 meses y hasta 13kg (se recomienda usar SRI a contramarcha el mayor tiempo posible).
- Grupo 1: de 9 meses a 4 años y de 9 a 18kg (Los mayores de 2 años o aquellos que sobrepasan en peso o talla, deben viajar mirando hacia adelante, y seguir las instrucciones del fabricante de la silla y del manual del vehículo para una correcta instalación).
- Grupo 2: de 4 a 6 años y de 15 a 25kg (se recomienda usar booster con respaldo).
- Grupo 3: de 6 a 12 años y de 22 a 36kg (puede utilizar booster sin respaldo hasta que el niño alcance 150 cm de altura y pueda utilizar el cinturón de seguridad propio del vehículo).
Los SRI son una herramienta fundamental porque reducen la tasa de mortalidad de un 70% en infantes. Además, disminuyen significativamente el riesgo de sufrir lesiones graves o fatales, brindando una protección adicional que los cinturones de seguridad convencionales no pueden ofrecer debido a la diferencia en la fisonomía de los niños. Es esencial que los adultos se aseguren de que estos dispositivos estén correctamente instalados y sean apropiados para la edad, peso y altura.
La seguridad vial es una responsabilidad compartida y es crucial comprometerse a crear un entorno seguro para todos, sobre todo para los más pequeños. La implementación adecuada de los Sistemas de Retención Infantil y la educación vial desde temprana edad son algunos de los pasos fundamentales para la reducción de accidentes.