La Comisión de Tránsito y Transporte de la Legislatura porteña emitió hoy dictamen favorable de la iniciativa que obliga a los taxistas a adherirse a una plataforma que permita recibir pedidos de viajes y habilita a los pasajeros a pagar el servicio por vías electrónicas.
El proyecto, que será debatida en el recinto la semana próxima, dispone también un cambio del taxímetro tal como se lo conoce en la actualidad, dado que será una tablet con la que el conductor permanecerá comunicado con el sistema de despacho de viajes.
Y, además, contará hacia afuera con un cartel que reflejará el estado del servicio: “Libre” cuando el vehículo esté sin pasajeros y sin solicitud de viajes; “Ocupado” cuando circule con clientes y “Reservado” cuando se le haya solicitado un traslado.
Según explicaron voceros del Ejecutivo en el marco de la reunión de la Comisión, la propuesta apunta, también, a reducir la cantidad de taxis que están circulando por la ciudad dado que no deberán estar buscando pasajeros, sino que recibirán el pedido del servicio por la aplicación.
No obstante, aclararon que los potenciales clientes podrán continuar tomando taxis en las calles porteñas al estilo tradicional, ya que la obligatoriedad de estar adheridos a la aplicación no le impedirá al conductor “subir” pasajeros en la vía pública.
Por otra parte, la iniciativa obliga a los taxistas a contar, también, con la opción de pago con tarjeta de débito y crédito en forma obligatoria, ya sea a través de una app, como por medio de un posnet o mpost.
“Hoy se calcula que sólo el 10 por ciento de los viajes en taxi se abonan a través de medios electrónicos de pago. La implementación de este punto estandarizará el servicio, posibilitando que el pasajero no tenga la necesidad de andar con efectivo, y cuente con más alternativas al tomar un taxi”, indicaron los autores del proyecto.
El servicio de taxis de la Ciudad de Buenos Aires está conformado por una flota de 37 mil autos disponibles a toda hora, que cuentan con identificación tanto para ser reconocidos por el pasajero, como para los controles de rutina en la vía pública.
La diputada de Vamos Juntos y presidenta de la Comisión, Cristina García, explicó que “desde que la ley sea aprobada y reglamentada, existirá un plazo de seis meses de convergencia para que los taxistas puedan adaptar los relojes. Habrá tiempo de hasta un año para que puedan cumplir con todos los nuevos requisitos”, concluyó.
