Las empresas ganadoras de las concesiones, cuyas licitaciones se llevaron a cabo en la Bolsa de Valores paulista, fueron el consorcio LDC Brasil, formado por las multinacionales Dreyfus y Cargill, y las empresas Marimex Despachos y Fibria Celulose.
A parte de los 112 millones de dólares, las concesionarias deberán pagarle 269,3 millones a la Companhia Docas do Estado de Sao Paulo (Codesp), administradora del puerto de Santos, para el arrendamiento de las tres áreas portuarias subastadas, a parte de los 159,4 millones de dólares que deberán invertir en construcciones edilicias, dando como total una suma de 514 millones de dólares como número final del monto negociado.
Las áreas comercializadas para arrendamiento que fueron tres: Ponta da Praia, destinada al movimiento de granos, ganada por LDC Brasil, por una suma de 79,4 millones; Paquetá, preparada para el manejo de papel y celulosa, obtenida por Marimex Despachos por 3,2 millones; y Macuco, para operaciones idénticas a la anterior, adquirida por Fibria Celulose, la cual pagó un total de 30,1 millones de dólares.
Ésta fue la primera camada de concesiones, la cual se denominó Bloque 1, de las 93 que se tienen pensadas el Gobierno brasileño.
