Durante el encuentro binacional sobre el Plan de Acción estival 2018, las autoridades mendocinas plantearon intentar conseguir bajar las demoras en el paso que los une con sus pares del país vecino en Santiago de Chile. De estos encuentros se elaborará un plan de contingencia para disminuir las engorrosas y largas demoras que se producen en el Paso Internacional Cristo Redentor.
La acción obedece a la gran afluencia de argentinos que veranean en playas trasandinas, y que se incrementará en enero de 2018 con la visita del Papa Francisco, que según estimaciones generará un movimiento turístico de 500 mil personas a través del Túnel Internacional Cristo Redentor. Si bien las autoridades locales reconocieron la importancia de los controles fitozoosanitarios y aduaneros de ambos países, se planteó la necesidad de flexibilizarlos durante la visita papal, procurando un sistema de control aleatorio y con un solo puesto chileno que abarque sus dos organismos.
Los voceros explicaron que a pesar del aumento del número de puntos de control en ambos complejos, el incremento en las dotaciones de personal y equipamientos de control no es suficiente para mitigar los efectos del flujo importante de turistas que se espera. En cuanto a los vehículos que ingresarán a la Argentina, sobre todo de regreso, y con el objetivo de descongestionar el paso, se hizo hincapié en la importancia de desdoblar los controles que se realizan en el Complejo de Horcones.
Alternativas
La idea es que el control actual sea sólo para el control de autos particulares entre el 15 y el 20 de enero, y que los controles de ómnibus se realicen en el área de control integrado (ACI) Uspallata, como se realizó exitosamente en oportunidad de la Copa América 2011, realizada en Mendoza. La Provincia insistirá con la necesidad de concretar la propuesta de AFIP Aduana de control de ventanilla única para automóviles particulares, lo que permitirá disminuir notablemente los tiempos de control y se eliminaría el formulario en soporte papel para simplificar los trámites.