Durante el último fin de semana, la Policía de La Pampa, en colaboración con la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y áreas de Tránsito municipales, realizó cerca de 1700 pruebas de alcoholemia en diversas rutas de la provincia. De estas, 29 resultaron positivas, destacando un caso con un nivel alarmante de 2,30 g/l de alcohol en sangre. Este operativo forma parte de la Alcoholemia Federal, un programa que busca mejorar la seguridad vial y se implementa de manera regular desde 2022.
Uno de los incidentes más preocupantes ocurrió en la ruta nacional 188, donde se interceptó una camioneta Chevrolet que circulaba de manera temeraria. El conductor, al ser abordado por las autoridades, mostró resistencia y se negó a identificarse, lo que generó una situación de tensión. Finalmente, tras someterlo al test de alcoholemia, se determinó que estaba bajo los efectos del alcohol, superando ampliamente los límites legales establecidos.
Como resultado de esta situación, el vehículo fue secuestrado y el conductor fue trasladado a la dependencia policial, donde quedó demorado. Las autoridades están avanzando con las acciones judiciales pertinentes por resistencia a la autoridad y conducción en estado de ebriedad, reiterando así el compromiso con la seguridad en las carreteras pampeanas.
