En el marco de las quejas de pasajeros y vecinos, la Justicia dio luz verde para que el próximo 9 de febrero la low cost Flybondi pueda inaugurar la nueva terminal aérea. Las empresas de micros de larga distancia piden igual trato e impulso para su sector.
El viernes pasado la jueza Martina Forns, del Juzgado Federal en lo Civil y Comercial y Contencioso Administrativo N° 2 de San Martín, aprobó la documentación presentada por el Ministerio de Transporte de la Nación y Aeropuertos Argentina 2000. De este modo, la aerolínea low cost Flybondi será la encargada de inaugurar el aeropuerto con su vuelo de regreso desde Córdoba.
En el marco de la “Revolución de los aviones” impulsada por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, la ex base militar (que también fue declarada para uso civil en 1968), funcionará especialmente para las aerolíneas low cost, que desde el año pasado comenzaron a operar en el país. La primera en hacerlo fue Flybondi, que cuenta con un solo avión y varias quejas de pasajeros: Ayer demoró a sus viajeros por 15 horas en un vuelo de Bariloche a Córdoba por condiciones climáticas adversas; El fin de semana pasado el equipaje tuvo que viajar de Córdoba a Bariloche por tierra debido al exceso de equipaje y llegó dos días después que los pasajeros; finalmente, el vuelo inaugural desde Córdoba hacia Puerto Iguazú tuvo que hacer un aterrizaje anterior a lo pactado por una falla técnica. Ayer, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) habilitó el segundo avión de la compañía.
El argumento del Gobierno sobre el impulso al sector aerocomercial es que de este modo “el país estará más y mejor conectado”. Sin embargo, Gustavo Gaona, vocero de la Cámara Empresaria de Larga Distancia (CELADI) informó a Notitrans: “Lo que nos preocupa es que cambiaron todas las normas habidas y por haber en tiempo récord para que las empresas extranjeras pudieran volar en el país. Los ómnibus hace años vienen pidiendo cambios normativos y un nuevo marco regulatorio que nos permita adaptarnos a los cambios actuales, al mercado, a la llegada de nuevos competidores y esto se nos da a un paso mucho más lento”. “No nos oponemos a los aviones pero queremos poder competir de igual a igual con las mismas herramientas”, agregó Gaona.
Actualmente, los aviones alcanzan 40 destinos contra 600 de los micros de larga distancia. Gaona admitió que CELADI no se manifiesta en contra del desarrollo aerocomercial pero pide “un poco más de celeridad en las decisiones”: “Es mucho más complejo porque generamos una red federal de transporte y hay que cuidarla. Somos empresas eficientes con un sistema deficiente”, afirmó el vocero. Por otro lado, advirtió que “debería darse la Revolución del Transporte, no solo de los aviones sino muchísimos destinos podrían perderse por tierra y eso no es negocio para nadie”. La Cámara apela a una igualdad de condiciones para ser competitivos pero a través de un “cambio profundo de normativas que termine con la burocracia y que permita disminuir costos para poder bajar tarifas”, ya que son reguladas por el Estado, que las calcula en función de los costos de la actividad.
Finalmente, Gaona aseveró: “La actividad del transporte tiene a sus equipos profesionales trabajando y colaborando con el Estado, proponiendo ideas, en conjunto y el Estado es después quien dispone. Se han avanzado en algunos puntos pero nuestras preocupaciones son los tiempos”. “Creemos que se puede hacer más rápido y se puede avanzar más rápidamente. No por cuidar a las empresas sino por proteger al sistema público de transporte que más pasajeros y destinos conecta a la Argentina”, concluyó Gaona.
