“En el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA) viven cerca de 15,8 millones de personas, lo que representa el 35 por ciento de la población del país y un 38 por ciento del padrón electoral. En este territorio, que ocupa solamente el 0,4 por ciento del país, se produce el 48 por ciento del PBI de la Argentina. Estos números son fundamentales para entender la complejidad del AMBA y su relevancia para el desarrollo nacional”, explicó Gastón Urquiza, director ejecutivo de la Fundación Metropolitana.
“Por primera vez en la historia consideramos que están dadas las condiciones para la institucionalidad de la Región Metropolitana. En el último tiempo se ha generado un combo de oportunidades en tres frentes. Por un lado, la creación, mediante el Decreto 1126 de la Comisión AMBA, un organismo que tiene el objetivo final de proponer una institucionalidad para la región. Los tres gobiernos (Nación, provincia y CABA) tienen el mismo signo político. Y por último, una sociedad que demanda una gestión exitosa a nivel políticas públicas”, afirmó Del Piero.
“La Comisión AMBA, presidida por el ministro Rogelio Frigerio y coordinada por Facundo Suárez Lastra, es una oportunidad que genera una exigencia de cumplimiento. Es el camino para que la Buenos Aires Metropolitana sea considerada, de una vez y para siempre, como sujeto y objeto de planificación, gestión y gobernanza. Es el momento de respetar competencias, planificar por áreas y accionar según las diferentes problemáticas”, agregó el presidente de la Fundación Metropolitana.
“La región cuenta con una amplia variedad de temas problema, situaciones de escala o impacto metropolitano: movilidad, uso del suelo y residuos, son hoy los más urgentes. La única forma de abordar soluciones es a través de la gobernabilidad, concepto que expresa el equilibrio entre las demandas de la sociedad y la capacidad del sistema político para satisfacerlas de modo legítimo y eficaz”, describió Del Piero.
“Ha llegado el momento de instrumentar una Agencia de Planificación Metropolitana. Un organismo que asista a los acuerdos marco específicos para el desarrollo económico y social, y administre los planes operativos de los distintos organismos metropolitanos. Es necesaria una institucionalidad ágil, profesional, que sea articuladora del conocimiento y los distintos intereses. De no cumplirse estos lineamientos, que determinen finalmente al AMBA como la principal economía regional del país, como una unidad socioeconómica complementaria al resto de las regiones del territorio, Argentina no logrará jamás un desarrollo sostenido y carente de desequilibrios y centralizaciones de todo tipo”, concluyó Del Piero.
“Estamos comprometidos a pensar las políticas públicas de la región conjuntamente con la Fundación Metropolitana. Tenemos las herramientas tecnológicas para hacerlo y la voluntad de trabajar junto a los decisores para que comprendan la importancia de este análisis para una transformación de la planificación en todos sus niveles”, destacó Lucas Lanza, director de Smart City Argentina.
(*) Presidente de la Fundación Metropolitana