La abogada laboralista Verónica Quinteros, asociada a la CTA de Ricardo Peidro, está siendo señalada por desmanejos e irregularidades en la Asociación de Personal Directivo de Ferrocarriles de Argentina (APDFA), que agrupa a personal jerárquico de ferrocarriles y puertos, por “la falta de transparencia en el manejo de fondos del Gremio y de la elección nacional de esa entidad sindical”.
APDFA encarará una elección nacional el 2 de marzo próximo, por primera vez habrá internas en el gremio, entre el oficialismo que está representado por la Lista Gris que encabeza el actual Secretario General, Adrián Silva, y los retadores de la Lista Verde y Blanca, que llevan a Leonardo Salom -actual dos del gremio- encabezando la boleta.
En estricto off a los que Notitrans tuvo acceso, diversos dirigentes apuntaron contra la representante legal de la lista oficialista por su “absoluta desidia ante las normas financieras del sindicato e imparcialidad en el proceso electoral”.
Especialmente, los críticos -tanto del propio oficialismo como opositores- se recuestan sobre la fuerte ascendencia que la voz de la abogada, cercana a los partidos de la izquierda, tiene sobre Silva y la forma en la que se pagan sus honorarios.
La abogada VIP de los 17 millones de pesos
Quienes conocen los números del gremio señalan un dato curioso, se calcula que, en los últimos tiempos, los costos y erogaciones en torno a su asesoramiento legal rondarían los 17 millones de pesos.
Fuentes gremiales que prefieren el anonimato ante el temor de la represalias de Silva, apuntan que “el gasto más grande del gremio es en el pago por honorarios, comisiones, litigios y asesoramientos legales”.
Corrupción y violencia: un oficialismo en descomposición
En los últimos tiempos, APDFA fue noticia por algunos hechos de violencia, como cuando se impidió el ingreso al Gremio de los dirigentes de la lista opositora, y por la decisión del Ministerio de Trabajo Nacional de ordenarle la suspensión de un Congreso Ordinario y otras irregularidades en el proceso electoral que se estaban sucediendo.
En todas esas situaciones, la cara, la voz y la pluma oficialista fue de la abogada del gremio, Verónica Quinteros, que tomó el rol que de Secretario General al j
Quinteros aprovechó su trabajo en APDFA para crear una red de abogados “contra la persecución gremial”, dedicada a los panfletos contra dirigentes peronistas y de otras gestiones de gobierno y fue clave en la participación del gremio dentro de la CTA, espacio recientemente abandonado.
Quinteros y la persecución a los que buscan aires de renovación generacional
La explicación sobre el millonario honorario de la abogada Quinteros podría entenderse al analizar otro dato: la letrada estaría siendo denunciada en el colegio de abogados de la Capital Federal por falta al código de ética profesional -puntualmente, el artículo 19-. Aseguran en off desde la oposición que, “si bien sus honorarios son costeados por todos los afiliados, Quinteros lleva adelante diversas denuncias y envía cartas documento contra los afiliados identificados con la lista opositora exclusivamente”.
Quienes pudieron entrar últimamente en contacto con Silva aseguran que lo encontraron muy nervioso ante las denuncias y los sondeos por el avance de la Lista Verde y Blanca. Todo está preparado por la oposición para fiscalizar el acto y que no ocurran “sorpresas” y hablen las urnas. Desde el entorno de Silva aseguran que van resistir y pueden ganar. Es clave sea el resultado que sea, tener un proceso, transparente y democrático. Gane quien gane.