La Federación Marítima Portuaria y de La Industria Naval de La República Argentina (FeMPINRA) que conduce Juan Carlos Schmid anunció a través de un comunicado que realizarán un cese de actividades por 24 horas el jueves 24 de mayo en rechazo al veto de la ley de Marina Mercante y al programa económico que lleva adelante el Gobierno Nacional. La medida de fuerza incluirá una movilización al Ministerio de Trabajo.
Finalizada la reunión que mantuvieron el jueves por la tarde los principales dirigentes del gremio, se emitió un comunicado en el que denunciaron que “El Poder Ejecutivo vetó los instrumentos que apuntaban a recuperar la industria naval y la marina mercante, resignando de esta manera la presencia de la bodega nacional en nuestras aguas y la construcción naval en nuestros astilleros”
“Al mismo tiempo los proyectos de transformación necesarios para las inversiones en el perímetro portuario, como el caso de las concesiones, a pesar de arduas negociaciones no terminan de otorgar precisiones ni seguridad acerca del empleo” agregaron.
El documento reúne una agenda de reclamos entre las que se destaca la necesidad de reactivar los astilleros de Río Santiago y prorrogar las concesiones actuales del Puerto de Buenos Aires hasta la finalización de las obras de infraestructura concernientes a la terminal Exterior y el rechazo de cualquier tipo de despidos en el sector.
“La verdadera razón es que el programa económico no funciona, la inflación no cede, el consumo se cae, los servicios aumentan y nosotros no queremos ser víctimas de los errores cometidos.”, afirmó Schmid, quien también encabeza la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT)
Asimismo en el documento desde la Federación sostuvieron que “Todo ello se da en un contexto sacudido por la crisis financiera y el reingreso al escenario nacional del FMI” y agregaron: “Los trabajadores sabemos en carne propia que su recetario fue el que envió a la calle a portuarios en el año ’95, a marítimos con la privatización de ELMA y la Flota Fluvial, a navales con la destrucción de la industria.”
“Siempre la razón esgrimida ha sido y es la cuestión fiscal, el cierre de la cuentas públicas, el equilibrio de la Nación, pero la Nación son hombres y mujeres que no pueden ser tratados como números”, denunciaron.
“¿Acaso fue el costo laboral el que provocó la corrida bancaria? Alientan la especulación y el dinero fácil que en lugar de ayudar a la producción, se esfuma en manos de los vivos de siempre.”, finalizaron.
La batería de reclamos se basa en lo expuesto a continuación:
Exigir la plena reactivación de los astilleros de Río Santiago y la renovación de nuestra flota pesquera.
Reiterar la anulación del Impuesto a las Ganancias y Paritarias libres.
Prorrogar las concesiones actuales del puerto de Buenos Aires hasta la finalización de las obras de infraestructura concernientes a la terminal Exterior y rechazar cualquier tipo de despidos en el sector.
Rechazar los vetos aplicados a las leyes que permitan desarrollar la Industria Naval y la Marina Mercante
Cuestionar los acuerdos pesqueros con los países nórdicos y Gran Bretaña que lesionan el interés nacional, descuidando la soberanía y el recurso ictícola.
Exigir políticas de igualdad de condiciones en el sector de producción de arena y empresas de dragado.
Reclamar en carácter urgente el saneamiento del servicio de transporte fluvial de pasajeros del Delta bonaerense, que afecta a 15.000 personas aisladas y cientos de familias sin educación ni atención médica.
Reclamar la participación de los trabajadores del sector en las negociaciones de los tratados de transporte del Mercosur en la Unión Europea.
Demandar el inmediato abastecimiento de combustibles para “bunker” que garantice la continuidad de la actividad y las respectivas fuentes de trabajo.
Denunciar que en las últimas órdenes de reparación de armadores argentinos, Tandanor produjo sobreprecios nunca antes vistos, ocasionando una distorsión en la producción que pone en riesgo la planta.