General Motors (GM) suspendió hoy la exportación a la Argentina de sus tres modelos producidos en Brasil, tras la deuda que la empresa ha ido acumulando durante los últimos meses,"debido a las restricciones del país vecino para liberar dólares para importar".
Según el presidente de GM Sudamérica, Jaime Ardila, "hace un mes que la industria aumtomotriz no consigue obtener moneda americana en el Banco Central de la Argentina". "Las cosas se deben normalizar cuando el problema con los holdouts se solucione", agregó el directivo de GM en relación al cepo cambiario que soportan las empresas del rubro, que se estima en una deuda de más de 2.500 millones de dólares para todas las empresas que exportan desde Brasil a la Argentina.
Como marco a las declaraciones de Ardila, el diario Valor apunta que "la exposición cambiaria preocupa" a las empresas de Brasil, "sobre todo por la perspectiva de nuevas desvalorizaciones del peso". La novedad que comunicó el ejecutivo de GM se dio a conocer un día después que la presidenta Cristina Fernández hizo fuertes críticas a la industria y le siguió reclamando a las empresas automotrices que "vendan autos a los que quieren comprar".