Este método vuelve a funcionar luego de la refacción y puesta en valor de 160 semáforos. Además, se colocó cartelería de leyenda variable en los extremos para anticipar a los conductores en aquellas situaciones en las que se active la medida. De esta manera, según afirmó el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se reducirá un 30 por ciento el tiempo de viaje de los 2800 autos que circulan en hora pico por sentido en ese tramo.
La avenida Leandro N. Alem cuenta con ocho carriles. De los cuatro carriles centrales, hay dos que corren en sentido hacia el Sur y dos hacia el Norte. Con esta nueva implementación, se generará una vía para atravesar sin complicaciones.
En casos de cortes, que se den tanto en la avenida como en la zona céntrica, se activará el contracarril desde el Centro de Control de Tránsito, ajustándose la sincronización de los semáforos de manera que queden 3 carriles en el sentido que lo precise y 1 en el sentido contrario.