Ante esta fecha, la Asociación Civil “Luchemos por la vida”, expuso los datos de su informe y determinó cuáles son las principales causas de accidentes y además brindan recomendaciones para evitarlas. Uno de los principales: alcohol al volante.
De acuerdo con la Asociación Civil, “Luchemos por la Vida”, en 2019 en Argentina murieron 19 personas por día en accidentes de tránsito, lo que suma un total de 6.627 fallecidos en un año. Además, en las épocas previas a la pandemia del covid, en el país se totalizaron 120 mil heridos de distinto grado y miles de discapacitados a causa de siniestros viales.
Con la llegada del coronavirus, según cifras de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) que depende del Ministerio de Transporte de la Nación, en 2020 las muertes por siniestros viales disminuyeron en un 45%. Sobre un total de 2.784 accidentes fatales fallecieron 3.138 personas, lo que representa una tasa de 6,1 siniestros fatales y 6,9 fallecidos cada 100.000 habitantes.
Sin embargo, los números no son tan alentadores como aparentan. Aunque desde la ANSV destacaron que la reducción casi a la mitad de los fallecidos supuso más de 2.000 vidas salvadas, esto no se da por una mejora en el desempeño de los conductores sino por la disminución de la circulación a causa de las restricciones por el covid.
En ese sentido, la Sociedad Argentina de Pediatría asegura que las lesiones por accidentes de tránsito constituyen la primera causa de muerte y de secuelas graves en niños y jóvenes. Según estadísticas del Instituto de Seguridad y Educación Vial, para 2019 el 39,3% de las muertes se dio en la franja etaria de entre 16 y 30 años, y el 43,5% de los siniestros correspondió a conductores de entre 17 y 30 años.
En Argentina, con motivo de conmemorar el próximo 10 de junio el día de la Seguridad Vial, el broker digital 123Seguro difundió una serie de recomendaciones para evitar los accidentes.
Causas de accidentes y cómo se pueden evitar
El teléfono celular se ha convertido en una de las principales causales de accidentes de tránsito ya sea para conductores como peatones. Para 2020, mientras que el 18,2% de los peatones cruzan la calle utilizando su teléfono móvil, entre los vehículos particulares que circulan por Buenos Aires a diario (cerca de 1.400.000), el 17,2% de los conductores utilizan un celular mientras conducen.
De acuerdo con las cifras oficiales de la ANSV, los seis segundos que una persona tarda contestar una llamada escribir un mensaje de whatsapp, a una velocidad de 100 km/h, equivalen a recorrer una distancia de 166 metros, luego de reaccionar y frenar.
Exceso de alcohol
El alcohol está presente en uno de cada cuatro siniestros viales y las principales víctimas de este tipo de accidentes son los jóvenes de entre 15 y 34 años, según datos del Observatorio Vial.
En ese sentido, se estima que por lo menos en uno de cada dos muertes en accidentes de tránsito en el mundo, está presente el alcohol.
Incorrecto uso del casco
Los motociclistas que usan el casco tienen un 73% menos de mortalidad que los que no lo usan. A su vez, quienes utilizan protección para su cabeza tienen hasta un 85% menos de lesiones graves que aquellos que conducen sus motos sin casco.
La gran obligación que nos protege: el uso del cinturón
Según cifras del Ministerio de Transporte, en Argentina, la mitad de los vehículos – 49,3% – circulan con todos sus ocupantes protegidos mediante el uso del cinturón de seguridad.
Sin embargo su uso varía de acuerdo a la posición que ocupa cada persona dentro del coche. Es decir, sólo el 55% de los conductores utilizan el cinturón, proporción que se reduce al 42,8% entre los que viajan en el asiento del acompañante y al 19,9% entre ocupantes de las butacas traseras.
Un informe de la ANSV revela que, en caso de choque, su uso reduce las posibilidad de sufrir lesiones cerebrales en un 33% en el caso del conductor y de un 56% en el pasajero. También disminuye la posibilidad de sufrir fracturas de cráneo en un 18% y heridas faciales en un 45% para el conductor y 64% para el acompañante. Además, reducen un 45% el riesgo de muerte de los ocupantes de las plazas delanteras y un 44% de los ocupantes de las plazas traseras.