Durante el acto realizado en la estación espacial ubicada en Malargüe, el ministro De Vido dijo: "Estamos convocando a radioastrónomos de Argentina para que puedan venir y obtener la información necesaria, que va a ser de inmenso valor para las universidades y para la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE)". A su turno, la Presidenta agradeció a la Unión Europea por la inversión de 45 millones de euros en la construcción de la antena, al tiempo que manifestó su entusiasmo por la posibilidad de que "pueda ser utilizado por científicos argentinos". Gracias a esta obra, Argentina ha completado la red de monitoreo que la Agencia Espacial Europa (ESA) utiliza para sus operaciones en el espacio.
El acuerdo para la construcción y explotación de la estación fue firmado con Argentina el 16 de noviembre de 2009 por un período de 50 años, y establece que el país brindará sus instalaciones y servicios a cambio de un 10% del tiempo de antena para los proyectos científicos nacionales en el espacio.
La antena se encuentra ubicada 30 kilómetros al sur de la ciudad mendocina de Malargüe y fue elegida por presentar las mejores condiciones de ubicación por su visibilidad y potencial de propagación de radio, informó la agencia europea. De este modo, la denominada "DSA 3 Malargüe" se une a dos antenas ya establecidas en New Norcia (Australia) y Cebreros (España), finalizadas en 2002 y 2005, respectivamente.
Con la nueva planta se completa la cobertura circunferencial para sondas de estudio del espacio lejano que operan más allá de los 2 millones de kilómetros de la Tierra, en donde "las comunicaciones requieren de actividades de apuntamiento mecánico y calibración de gran exactitud", detalla un informe técnico de la ESA.
La antena
La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) será el organismo encargado de implementar el acuerdo y coordinar a nivel nacional el 10% de tiempo de uso de la antena.
La construcción de la antena y el equipamiento relacionado fue contratada con SED Systems (Canadá) y Vertex Anennetechnik (Alemania). La estación insumió una inversión de 45 millones de euros y comenzó a construirse en enero de 2010. En tanto, recibió sus primeras señales de prueba el 14 de junio de 2012, cuando la sonda Mars Express transmitió datos desde Marte.
Según detalló la Agencia Espacial Europea, con el nuevo anillo de estaciones "la ESA se independizó de la Red de Espacio Profundo (Deep Space Network) de la NASA para el control de sus misiones de estudio del espacio profundo". Sin embargo, ambas agencias se comprometieron a realizar de manera conjunta el seguimiento de satélites.