Metalsur, perteneciente al grupo Marco Polo y que fabrica carrocería para colectivos, tomó la decisión de suspender durante un mes a 500 trabajadores de su planta ubicada en Villa Gobernador Gálvez, Santa Fe. De acuerdo a la compañía, es por la caída en la demanda.
A partir de esta determinación, los trabajadores afectados cobrarán un 80% de su salario. Hay otros 140 que sufrieron el cese de sus contratos, para los que acordaron el pago de una bonificación y el compromiso de recontratarlos si repunta la actividad.
“Lamentablemente cinco años después volvemos a recorrer este camino para tener que defender las fuentes de trabajo”, explicó Antonio Donello, Secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) en Rosario, al Diario La Capital, en referencia a situaciones similares que se vivieron durante el gobierno de Mauricio Macri. De acuerdo a lo informado por Donello, la situación se replica en otras empresas, pymes y talleres que comenzaron a pararse y tener problemas con los pagos. “Se está viendo una situación de bastante turbulencia en el ámbito laboral”, con “cierres intempestivos de empresas”, explicó en referencia a esto Pablo Cerra, abogado de la UOM, al mismo medio.
Marco Polo es una empresa de capitales brasileños que se especializa en carrozado de colectivos. Concentra la producción de unidades urbanas desde hace varios años pero que en la actualidad sufre una caída en la actividad. Por su parte, Metalsur es una metalúrgica que pertenece desde el 2019 al grupo y trabaja ese rubro.
