El gobierno de la Provincia de Buenos Aires expresó su intención de asumir la operación del servicio ferroviario entre General Guido y Divisadero de Pinamar, luego de que Trenes Argentinos anunciara su suspensión por tiempo indeterminado. El ministro de Transporte bonaerense, Martín Marinucci, confirmó que solicitaron a la Nación la cesión del material rodante y la infraestructura ferroviaria para garantizar la continuidad del servicio.
Desde el Gobierno nacional justificaron la suspensión en cuestiones de seguridad. Según Trenes Argentinos, el estado de la infraestructura genera movimientos irregulares en la formación durante la marcha, y el deterioro de los puentes representa un riesgo para los pasajeros. La medida se enmarca en la declaración de emergencia ferroviaria y en la falta de obras de mantenimiento a lo largo de los años.
La suspensión del tren generó preocupación en la Provincia y en los municipios afectados. Desde General Madariaga, el intendente Esteban Santoro expresó su inquietud ante la posibilidad de una interrupción definitiva del servicio. En tanto, funcionarios bonaerenses cuestionaron la decisión del Gobierno nacional, asegurando que el estado de las vías permitía la continuidad del servicio con un mantenimiento adecuado.
Mientras la Provincia busca garantizar el funcionamiento del tren, la decisión final sobre el traspaso sigue en manos del Gobierno nacional.