Viviam Perrone, integrante de la Asociación Madres del Dolor y de la Asociación Internacional de Víctimas de Tránsito, hizo un llamado urgente para que las capacitaciones para obtener y renovar licencias de conducir sigan siendo obligatorias.
“Con las cifras tremendas de muertos viales y lesionados que tenemos, nos falta mucho para poder tomar una decisión voluntaria. Lamentablemente aún no hay conciencia de lo que significa la inseguridad vial, por eso necesitamos de la obligatoriedad de las capacitaciones y de la renovación de la licencia para conducir, y controles efectivos en las calles y en las rutas”, dijo Perrone durante una visita que realizó al predio de la Fundación Profesional para el Transporte (FPT), en Escobar.
A partir de la trágica experiencia que vivió en 2002, cuando Kevin Sodano, su hijo de 14 años falleció tras ser atropellado por un automóvil y abandonado en Vicente López, Perrone se transformó en una activa militante de la seguridad vial. En 2004, junto con un grupo de mujeres que también había perdido a sus hijos de manera violenta (en hechos viales y delictivos), creó la Asociación Madres del Dolor.
Como una de las referentes más prestigiosas y respetadas de la causa, Perrone se interesó en la tarea de capacitación que llevan adelante FPT y la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) en pos de la profesionalización del sector.
“La historia de Viviam es un recordatorio constante y doloroso de lo que ocurre cuando se circula de manera irresponsable, sin respetar las leyes de tránsito. La capacitación es un elemento clave para la construcción de la seguridad vial, y en eso trabajamos cada día, desde hace más de 30 años”, dijo Aníbal Goichik, Presidente de FPT, antes de admitir la preocupación compartida respecto de la posible eliminación de la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LINTI) y de los cambios en el sistema para la obtención de licencias para conducir automóviles.
“Que exista la obligatoriedad para obtener la licencia de conducir profesional hace que, de a poco, el tema (de la responsabilidad y seguridad vial) se vaya haciendo carne, como pasó con el cinturón de seguridad. Hoy la gran mayoría no necesitamos que nos digan que tenemos que colocarnos el cinturón, lo hacemos. Pero no ocurre lo mismo con alcohol cero, con la distracción al volante y con las capacitaciones, porque la gente no sabe por dónde empezar”, reflexionó Perrone.
La fundadora de “Madres del Dolor” dijo que el hecho de que “existan lugares donde te capaciten, te guíen y te enseñen, es importantísimo no sólo para el chofer, sino para toda la sociedad”.
Luego de reunirse con autoridades y colaboradores de FPT, Perrone recorrió los diferentes Departamentos de la Fundación, probó uno de los simuladores de camiones que se utilizan como complemento de la formación teórica y de las prácticas en camiones-escuela; se interesó especialmente en las evaluaciones psicosensométricas y en el contenido de los diferentes cursos que se dictan en Escobar y en las más de 80 Unidades Evaluadoras de todo el país.
“La educación y la capacitación son muy importantes en relación con la siniestralidad vial”, pero son varias “las patas interrelacionadas” en el tema, advirtió Viviam: Legislación, campañas de difusión y concientización, educación vial, vehículos seguros, rutas en buen estado y controles. “No sirve una cosa sin la otra. Vivimos en sociedad, circulamos por rutas y calles que compartimos con otros y por eso es muy importante respetar las normas, pero para eso es necesario estar capacitados. La capacitación y el control constante en rutas y calles -sea a través de las licencias profesionales o para conducir-, son una pieza fundamental” para que el sistema funciones de manera correcta.
“No queremos más muertes. Con cada muerte vial se destruye una familia entera para toda la vida. El dolor que provoca la pérdida de un ser querido de esta manera violenta no pasa nunca”, añadió Perrone.
Por último, Goichik destacó que, pese a la complejidad del contexto actual, FADEEAC y FPT mantienen su compromiso con la profesionalización del transporte de modo inalterable.
“Estamos orgullosos de ser una institución referente a nivel nacional e internacional, convencidos de que a la seguridad vial la construimos entre todos y que para lograrlo es necesario contar con conductores preparados para operar con los más altos estándares de seguridad. La capacitación de los choferes es una inversión que realizan las empresas del sector, y es crucial para la seguridad de todos en la ruta”, concluyó Goichik.
