El Sindicato de Motoqueros reclama que la empresa se apegue a las normativas que regulan la logística sobre dos ruedas. Denuncia que la firma basa su negocio sobre la negación de la relación laboral con sus trabajadores
La Asociación Sindical de Motociclistas Mensajeros y Servicios (ASiMM), que conduce Marcelo Pariente, realizó este miércoles un “escrache” a la empresa/aplicación “GLOVO”, situada en la avenida Monroe 2716 (CABA), en el marco de un plan de lucha para combatir el fraude laboral en dicho servicio de “Mensajería Urbana”.
La organización gremial exige que “GLOVO” cumpla con las normativas y leyes que regulan la logística en dos ruedas, y acusan a la empresa de montar su negocio sobre la negación de la relación laboral que la une a sus empleados.
“Estamos entrando en una segunda etapa de conflictividad, en la cual las aplicaciones de mensajería locales, luego de fracasar, están siendo compradas y absorbidas por grandes aplicaciones multinacionales. En este caso la multinacional GLOVO compró y absorbió a la local KADABRA. El problema es que los nombres cambian pero el fraude laboral continúa. A nosotros no nos importa cómo manejen el negocio en otros países, si quieren hacer mensajería urbana en Argentina, van a tener que cumplir con los trabajadores. Los antecedentes de GLOVO en España e Italia son bochornosos. Ya bastante tenemos con los empresarios argentinos, para encima tener que andar renegando con los gringos”, disparó Maximiliano Arranz, Secretario Adjunto del gremio.
El dirigente aseguró que “el sindicato tiene una gran capacidad de daño, y el miércoles se lo demostramos GLOVO con un escrache. Pero tenemos más y mejores cartas por jugar. Esto continúa. Somos trabajadores del transporte y sabemos hacernos respetar”.
La empresa GLOVO ofrece por medio de su aplicación servicios de mensajería, evitando regulaciones y legislación al tratarse de la vía digital. Los trabajadores pueden ofrecerse a la prestación, sin ser reconocidos como empleados de la firma, es decir, sin poder ejercer sus derechos laborales correspondientes.
Dentro de las exigencias requeridas por el gremio, se encuentra la extinción de toda práctica de fraude laboral por parte de la empresa. “Manejarse con un servicio de mensajería urbana, con trabajadores precarizados, algunos en negro y otros con monotributo, es inaceptable. Al parecer las mentiras que utiliza la empresa para reclutar motociclistas no están teniendo los resultados que ellos pretenden, y ante la falta de personal intentan nutrirse y aprovecharse de la nueva ola de inmigrantes provenientes de Venezuela, que ante la necesidad no dudan en intentar realizar el trabajo en bicicleta completamente desprotegidos y al margen de toda legislación vigente. Que Matias Gath (ex dueño de KADABRA y actual gerente de GLOVO en Argentina) se haga cargo y acuse recibo; y que los consumidores sepan que son responsables solidarios ante la ley por cualquier cosa que le pase a los trabajadores, y que el sindicato con su equipo de abogados no va a dudar en hacer los reclamos legales pertinentes tanto a la empresa como a sus clientes”, sentenció Arranz.
ASiMM cuenta con más de 4.500 afiliados en la ciudad de Buenos Aires y provincia de Buenos Aires. El sindicato agrupa a los trabajadores que realizan sus tareas laborales utilizando como herramienta de trabajo una moto, triciclo, ciclomotor, cuatriciclo, bicicleta y/o todo vehículo de dos ruedas que realice gestiones, entregas y retiro de sustancias alimenticias, comercio electrónico, y elementos varios de pequeña y mediana paquetería en cualquiera de los vehículos citados en un plazo menor a las 24 horas.