El comité de investigación de la tragedia informó a través de un comunicado que solamente se pudieron recuperar 88 cadáveres y apuntó a "la falta de respeto de parte del armador de las normas de seguridad", consignó la agencia ANSA.
Los primeros detenidos fueron Svetlana Iniakina, directora general de Argorechtur, la compañía que alquiló la embarcación, y Iakov Ivashov, un funcionario del Registro del Transporte sobre el río Kama, encargado de los controles técnicos de las embarcaciones, informó la agencia local Interfax.
Los detenidos podrían tener una condena de hasta 10 años de cárcel bajo la hipótesis del delito sobre la "violación de las normas de seguridad con la muerte de al menos 10 personas".
En esta causa, se abrió también una investigación por omisión de socorro contra los comandantes de dos embarcaciones, la Arbat y el Dunaiski-66, acusados de no brindarle auxilio a los náufragos, un delito que contempla dos años de prisión.