En el marco del Operativo Verano 2019 se realizó el control a 1.600.842 vehículos en todo el país. Desde el 20 de diciembre de 2018 hasta el 10 de marzo, más de 650 fiscalizadores y 250 móviles se desplegaron en 264 puntos turísticos y estratégicos del territorio nacional con el fin de garantizar una circulación segura en la época de mayor tráfico vehicular.
En esta acción conjunta entre la CNRT y la ANSV también participaron Gendarmería Nacional, Prefectura, las agencias de seguridad vial provinciales, las policías viales y las direcciones de tránsito locales.
“ Nuestro compromiso como Estado es cuidar a los argentinos, pero necesitamos de todos para generar un verdadero cambio cultura: sin beber alcohol a la hora de manejar, usando el cinturón de seguridad, respetando las velocidades máximas y las normas de tránsito”, expresó al respecto Guillermo Dietrich.
El objetivo de los controles apuntó a reforzar la presencia de los agentes en las rutas y terminales de ómnibus de todo el territorio nacional. Además, se hizo hincapié en la incorporación de nuevas tecnologías para agilizar los procedimientos: radares, drones y otros dispositivos digitales fueron herramientas vitales para lograr un control más certero y transparente tanto en el transporte de cargas y pasajeros como en los vehículos particulares.
En los controles de este operativo, la CNRT puso especial énfasis en la prevención de consumo de alcohol y sustancias, como en la retención de vehículos clandestinos. Para ello se realizaron 452.189 fiscalizaciones a transporte de pasajeros y cargas, incrementando así un 136% los controles respecto del operativo verano del año anterior, donde se fiscalizaron 191.585 vehículos.
Datos
De los test de alcoholemia ejecutados, 69.211 resultaron negativos, y 107 positivos, representando un 594% más que el año anterior, donde solo se lograron realizar 9.984. De este modo, el 23% de las fiscalizaciones incluyeron el test de alcoholemia, superando ampliamente el total registrado en el verano de 2018. Durante esta época del año Rosario y Capital Federal fueron las ciudades que arrojaron más positivos.
En total se infraccionaron 14.471 vehículos y se retuvieron 3.037 de los cuales 147 se encontraban prestando un servicio al cual no estaban habilitados, y 147 vehículos no poseían habilitación, por lo cual se encontraban circulando ilegalmente, incrementándose en un 58% respecto al verano de 2018. Entre las demás infracciones aparecen falta de RTO y no pasar los controles físicos, entre otras. Hace un año atrás fueron 93 los vehículos retenidos que circulaban de forma ilegal, superando de esta manera el 158%.