Las automotrices niponas más grandes del mundo anunciaron hoy la suspensión de actividades en sus plantas operativas locales en relación a la catástrofe sufrida por dicho país el viernes pasado.
Toyota y Honda son las dos marcas de referencia del mercado automotriz japonés, y las últimas horas salieron a declarar respecto a la situación del abastecimiento poniendo paños fríos al mercado internacional en alerta. La situación de análisis radica más que en las propias fábricas, en la producción de los proveedores y puertos que se relacionan con las terminales.
Toyota aseguró que los vehículos tienen una demora de seis semanas en llegar a Europa, es por eso que las actividades en las plantas no mostrarían un efecto inmediato sobre las operaciones. Honda por su parte explicó que desarrollaron un centro de coordinación de emergencias en las plantas de Inglaterra y Japón desde donde ya constataron el normal funcionamiento del 50% del total de 113 proveedores con que cuenta la automotriz.
El panorama si bien comenzó siendo de conmoción, con el pasar de los días se van estableciendo registros que muestran al sistema productivo fuera, al menos en cifras macro, de peligros de desabastecimiento incontrolable.