Choferes de distintas líneas de colectivos del grupo Dota realizan una protesta frente al juzgado laboral 2 de la Ciudad desde esta mañana, en reclamo a una impugnación de las elecciones realizadas en octubre pasado en la Unión Tranviarios Automotor (UTA), por lo que las líneas 21, 28, 57, 117, 161 y 168 prestan menos servicios.
En esos comicios resultó ganadora la única lista habilitada por la Junta Electoral, la oficialista Celeste y Blanca, encabezada por el dirigente Roberto Fernández, quién resultó reelegido al frente de la organización sindical por cuatro años más.
Sobre la protesta en las puertas del juzgado laboral, ubicado en Lavalle al 1200, Fernández, en diálogo con Télam precisó que “la misma se lleva adelante con los subsidios que se le otorgan a la empresa DOTA, que se da el lujo de meterse en la interna gremial de la UTA”.
La empresa DOTA opera las líneas 21, 28. 57, 117, 161 y 168, y, con la protesta, la frecuencia de dichas líneas puede verse afectada, indicaron voceros de la empresa.
Fernández explicó que “quienes protestan, amparados por la patronal, quieren impugnar una elección de la que no pudieron participar por no cumplir con los requisitos estatutarios”.
El gremialista destacó que la lista opositora Azul, que encabezaba el ex secretario de Organización de la UTA, Miguel Bustinduy, no cumplió con lo que marca el estatuto y no pudo participar de los comicios según dictaminó la Junta Electoral”.