El auto estuvo a disposición del sumo pontífice en su visita a Nueva York el año pasado. Esta vez, debido a la subasta organizada por la arquidiócesis de la ciudad, tendrá un nuevo dueño, que pagará 135.000 dólares por el vehículo, siete veces más que los 18.700 dólares de su precio de mercado.
La puja por ese Fiat 500 Lounge, con el que el pontífice recorrió la Gran Manzana en septiembre pasado, se inició el pasado 17 de marzo a través de la web CharityBuzz.com. Además del automóvil, el ganador de la subasta tendrá la oportunidad de encontrarse con el cardenal de Nueva York, Timothy Dolan, y de que éste bendiga el vehículo, precisó la agencia EFE.
Los fondos obtenidos con la venta se destinarán a escuelas católicas y organizaciones benéficas vinculadas a la Iglesia. El pequeño automóvil recibió mucha atención durante la estancia del papa en Estados Unidos, en parte por su contraste con los grandes autos blindados que lo rodeaban durante sus desplazamientos. En enero de este año la arquidiócesis de Filadelfia subastó un modelo similar usado por Francisco durante su paso por la ciudad por unos 82.000 dólares, más de cuatro veces el valor real.