Se creó la Asociación de Personal de Plataformas (APP), que busca mejorar las condiciones laborales de quienes desempeñan tareas mediante plataformas digitales de mensajería y transporte. Aunque no cuentan con personería gremial, la organización quedó inscripta en la Secretaría de Trabajo.
Si bien el desarrollo de negocio de las APP, proponen al trabajador ser “socios” o ” ser tu propio jefe”. Las condiciones laborales y horarios que manejan las empresas empleadoras al parecer no colman las expectativas planteadas. “Trabajadores de plataformas nos presentamos en la Secretaria de Trabajo de la Nación para inscribir el primer sindicato de plataformas digitales de la Argentina y de América. El gremio busca organizar a los trabajadores que transportamos productos y personas”, aseguraron desde la flamante asociación gremial, mediante un comunicado.
El documento también detalla el origen de la organización: “En julio de este año los trabajadores de envíos a domicilio Rappi comenzamos a reunirnos y discutir cómo mejorar nuestras condiciones de trabajo. Fuimos convocados a participar de las plataformas con consignas como ‘se tu propio jefe’. Pero rápidamente comenzamos a darnos cuenta que las aplicaciones funcionaban gracias a nosotros, y no podíamos decidir nada”, agregaron.
La disconformidad por la modalidad laboral que promocionan las empresas alcanzó también a quienes prestan servicio en Glovo, Uber y Cabify, que actualmente funcionan en el país. Según el portal Apertura, el vocero de APP y delegado de Rappi, Roger Rojas, reclamó que se trata de “una relación de dependencia encubierta”. “Tendrán que reconocerlo a mediano o largo plazo. Las otras aplicaciones tienen el mismo problema que nosotros: las empresas imponen y nosotros queremos que nos incluyan en la toma de decisiones”, añadió.
En este sentido, el abogado de APP, Juan Otta, contó: “Hay margen para que las empresas readecúen su modalidad”, según lo publicado por Apertura.
La postura de las firmas
Joaquín Wagner, fundador la plataforma de mensajería que comenzó a operar a comienzos de 2017, Treggo, sostuvo: “No le veo mucho sentido a crear un sindicato porque este tipo de economía no tiene trabajadores que trabajen para una, ya que son independientes y hasta pueden ejercer el mismo rol en dos aplicaciones a la vez”.
Por su parte, Rappi emitió un comunicado en el que recordó que tiene 150 empleados en el país, donde, en siete meses, invirtió más de siete millones de dólares. “Reforzamos el compromiso en trabajar junto con las autoridades para desarrollar un marco normativo que se adapte al nuevo paradigma y desafíos de la economía colaborativa y digital 4.0″, remarcó.
Explicó que, en su compañía, el 90 por ciento de los son motociclistas que ya pertenecen a la Asociación Sindical de Motociclistas y Mensajeros (ASiMM). “Sindicalizar en función de destruir no es bueno. Esto le da trabajo a mucha gente”, advirtió.
Desde Uber, señalaron que estos reclamos no reflejan la realidad de la empresa. “Hoy no tenemos ningún planteo de este tipo. El 60 por ciento de los choferes trabaja menos de 20 horas a la semana“, apuntaron. En tanto, Cabify les dio libertad a sus conductores para unirse al sindicato