Los ministros de Interior y de Justicia de la Unión Europea (UE) decidieron, en una reunión extraordinaria en Bruselas, reforzar de manera "inmediata" los controles en las fronteras, incluso para los ciudadanos europeos. Pidieron además una reforma del código Schengen, para que esos controles sean "sistemáticos y obligatorios" para todos, y no únicamente para los ciudadanos de terceros países."Es un cambio crucial", dijo el ministro de Interior francés, Bernard Cazeneuve,
"Europa ya perdió demasiado tiempo", añadió tras la reunión convocada por los atentados del viernes pasado en París, que dejaron 130 muertos y más de 350 heridos.La Comisión Europea, dijo el ministro, "hará propuestas antes de fin de año" para modificar el código fronterizo del espacio Schengen, compuesto por 22 de los 28 países de la UE, más Noruega, Suiza, Islandia y Liechtenstein.
El espacio Schengen, una de las muestras de la construcción europea más concretas, es una zona de libre circulación de personas en donde los controles fronterizos internos fueron eliminados, salvo en circunstancias excepcionales. Cazeneuve precisó que los nuevos controles deberán hacerse "consultando las bases de datos nacionales y europeas, como el SIS (Sistema de Información Schengen) y las bases de datos de Interpol", que contienen señalamientos sobre yihadistas y las órdenes de captura internacionales.
Hasta ahora los controles de los ciudadanos europeos que cruzan las fronteras de Schengen se limitan a una verificación de identidad."Hoy tenemos controles aleatorios, pero no sistemáticos", dijo por su parte el ministro del Interior español, Jorge Fernández Díaz.