El aviso, realizado por Arseni Yatseniuk, se produjo semanasdespués de que un atentado reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI) provocara la caída de un avión ruso con 224 personas a bordo, en la península del Sinaí. "El gobierno ucraniano decide prohibir todos los vuelos de las aerolíneas rusas que transitan por el espacio aéreo ucraniano", anunció Yatseniuk en un consejo de ministros. "Rusia podría utilizar el espacio aéreo ucraniano para llevar a cabo provocaciones", consideró.
Algunos observadores opinaron entonces que si se producía un incidente similar con un avión ruso en Ucrania, Moscú podría acusar a las autoridades de Kiev y enviar sus tropas a esa exrepública soviética.
En octubre, Ucrania y Rusia ya habían prohibido los vuelos directos entre ambos territorios. Las autoridades rusas también habían cerrado su espacio aéreo a los aviones ucranianos, pero hasta ahora los aviones civiles rusos podían sobrevolar Ucrania.
