Según denunció la Intersindical de la Cuenca Carbonífera, desde que Omar Zeidán asumió la intervención de Yacimiento Carbonífero de Río Turbio (YCRT), se perdieron 800 puestos de trabajo entre despidos, cesantías y retiros voluntarios. Los gremios advirtieron que recurrirán a la Justicia para preservar las fuentes laborales.
La intersindical continúa negociando con la Intervención de Omar Zeidán, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del emprendimiento minero y los puestos de trabajo. A pesar de no haber llegado a ningún acuerdo en el 2018, luego del rechazo al Procedimiento Preventivo de Crisis por parte de los sindicatos, los resultados productivos de Río Turbio y 28 de Noviembre permitirían iniciar el camino hacia la sostenibilidad de la empresa.
Por su parte, ATE Río Turbio, Luz y Fuerza, APS y La Fraternidad tienen planeado avanzar en un Recurso de Amparo para exigir al Estado Nacional que se preserve el patrimonio de YCRT para cuidar los puestos de trabajo.
Cabe señalar que el conflicto comenzó a principios del 2018, cuando se inició un plan de despidos masivos en YCRT. En ese entonces, la intervención llevó adelante también un programa de retiros voluntarios, lo que complejizó la situación laboral entre YCRT y los trabajadores.
Según indicó Luis Avendaño al portal La Opinión Austral, referente de Luz y Fuerza de la Cuenca Carbonífera, aseguró que durante el último año desaparecieron 250 puestos de trabajo entre despidos masivos y retiros voluntarios.
“Cuando llegó la Intervención actual en la empresa había unos 3.000 puestos de trabajo, y hoy después de un año caótico en YCRT no superan los 2.200 puestos”, explicó Avendaño. Ahora, los trabajadores optaron por la contratación del abogado Eduardo Barcesat para avanzar contra el Estado Nacional en un Recurso de Amparo.
“En las distintas luchas que dimos para defender la empresa, nos recomendaron dialogar con el abogado y le contamos toda la historia y presente de YCRT. Se determinó avanzar con un Recurso de Amparo de no innovar para defender los puestos de trabajo y la carboeléctrica estatal, que es lo que pedimos desde siempre para que no la privaticen”, precisó Avendaño.
Por su parte, la intervención sostiene que el 2018 cerró con buenas expectativas y que el desafío será incrementar la productividad de la Cuenca. Sin embargo, el gerente de Producción, el Ing. en Minas Mario Capello aseveró que a la empresa le queda un largo camino para alcanzar la sostenibilidad.
A pesar de ello, Capello afirmó “si sostenemos los niveles productivos de acuerdo a lo planificado necesitaremos más trabajadores, por lo que rechazamos aquellos rumores que dan cuenta que habrá despidos” y postuló que “actualmente el organigrama de YCRT está compuesto de un 50% de personal en boca de mina, mientras que el recurso humano restante integra el área de Servicios y área Administrativa”.